Porque adentro tuyo siempre ruge, La Batalla Interna.
Entre una voz y una emoción te encontras, sumergido, en busca de la salvación.
Indecisa y eterna, la guerra continúa.
Pasión, Emoción, Corazón, disputan la Racionalidad, Lógica y Mente. Entre bandos queres aire. La mente habla. “Esto es más seguro, esto te dice que hagas el mundo.” Tiene razón. Pero adentro lo sentís. Esa incomodidad. Ese augero en la panza. Ese aprieto en la garganta. El corazón no habla en oraciones. Transmite experiencias. Es miedo lo que sentis? Si. Y es aquel miedo quien te cierra las manos a las sogas. El Eterno Confort gozando la estabilidad de la indecisión.
La mente habla. “No tenes el tiempo, no tenes la plata para hacer eso.” Pero el corazón la desafía. “De La Arena; Agua. Reflejemos Un Alma Abundante." Te dice.
La batalla continua y en el limbo, el aire se escapa. Cerras los ojos confías en el instinto, la pasión, el corazón. Aflojas la soga de la mente, y Ellla se defiende: “No te das cuenta? Estas cayendo otra vez! Caes en La Ceguera Emocional. Te ciega y te ciega. Mira más allá, no sos lo que sentís. Sos El Observador, que sentís no determina tu accionar."
No esta equivocada. El corazón te ha hecho doler.
“Si, te hago sentir. Como crecemos, como mejoramos, sin doler?Tengo que incomodarte, no hay otra manera de transformarse en un Condiscípulo Del Cambio” Y latiendo en dolor, susurra; “Es ella quien te frena, Es ella quien te compara con la sociedad. Con la cultura. Con el pasado. Es ella quien te frena con sus estigmas y tradiciones. Es Ella, tu Peso Muerto."
Y Ella, en tu cabeza, ruge en ira: “Latís y plasmas un mundo erróneo. Acaso la sociedad entra está mal? Acaso vos tenes LA razón? ¿Quién dice que lo excéntrico es lo correcto? Vos latís y plasmas La Distópica Ilusión. ”Observador, es El quien te hace sentir las necesidades, quien te hace regar tu Nocivo Resabio. Ya tenes todo planeado. No lo tires por una simple emoción. Por un simple latir."
“¿Qué es la vida sino el ser Espontáneo En Todo Páramo? Cuál es la gracia de vivir una vida sin sorpresas, una vida arreglada?” Late resignado.
Y llego tu momento. Acá y ahora. Querido Observador. Que bando te va a salvar?
Nadie sabe